Por: Renato Moreno Echeverría
Cuando el Presidente Correa asumió el poder respaldado por una votación abrumadora, hasta los que no votamos por él nos entusiasmamos pensando que un hombre joven, inteligente, no contaminado haría algo diferente a los políticos tradicionales por un Ecuador Próspero y solidario.
El desengaño no se hizo esperar. Desde el principio puso de manifiesto su intransigencia, su inseguridad, su prepotencia, que día a día se han ido acentuando, mientras el País se polariza en bandos irreconciliables donde prevalece el odio y la rencilla propiciada por nuestro Mandatario. Aplicando a la perfección aquello de “Divide y reinarás”, ha consolidado, rápidamente , todo el poder para sí, convirtiéndose este hecho en “Razón de Estado”.
Todo lo que prometió erradicar ha tomado más fuerza: Encubrió a su gran amigo y colaborador en el “Escándalo de los Pativideos”, ninguna investigación seria, ningún detenido, simplemente echar tierra sobre los hechos, como los gatos cubren apresuradamente sus excreciones. La prensa ecuatoriana ha sido acusada de mediocre y corrupta al servicio de “Banqueros”, pretendiendo silenciarla con amenazas que van desde intimidar a los medios de comunicación hasta su soterrada incautación. Nuestros mejores comunicadores han sido tachados con los peores epítetos entre los que destacan “Gordita Horrorosa”, “Saquen a este señor de la rueda de Prensa” y “Bestias Salvajes”; Los políticos han sido su blanco favorito: “Muerte a la partidocracia”, mientras decenas de ministerios y altos puestos públicos están ocupados por esos mismos que denuesta. Intolerante en extremo con la opinión ajena que no le sea favorable: “cállate Majadera”; “por gente idiota como tu están así los emigrantes”; “indígenas, grupo folclórico y pintoresco”; “Cúpula de la Iglesia Católica al servicio de los grupos de Poder”; “Coidearios infiltrados”; “Mientras Uribe esté en el Poder, será muy difícil reestablecer relaciones con Colombia”; “Ustedes son cuatrocientos, los otros cincuenta, resuelvan el problema”.
Al más puro estilo populista y demagógico ha pretendido comprar la conciencia de los ecuatorianos pobres, con dádivas oportunistas, promesas nunca cumplidas, gastando sin control los fondos del Estado, mientras la economía se derrumba. Cientos de “primeras Piedras”, a lo largo y ancho del País, miles de proyectos maravillosos hechos simplemente de papel. Mientras tanto, los vehículos de despedazan en las carreteras intransitables, los enfermos mueren por falta de medicinas en los hospitales públicos, la delincuencia se apoderada de la ciudad y el campo y miles de ecuatorianos arriesgando su vida, emigran de este “Paraíso” buscando mejores días en otros lares.
Se siente inerme si no lo controla todo: Los Poderes del Estado, sus Instituciones, la Asamblea Constituyente, los Jueces y Magistrados, la Prensa, la Iglesia, los estudiantes y con tal propósito no importa recurrir a las “viejas prácticas”, comenzando por las atribuciones que se abrogó la Asamblea Constituyente, a la que el mandato ciudadano le impuso dos tareas solamente: hacer la nueva carta política y organizar el reordenamiento de las Instituciones Públicas. So pretexto de Poderes “Absolutos”, comenzó haciendo leyes y mandatos y terminó aprobando una Constitución entre gallos y medianoche donde se impusieron las consignas del Presidente y sus asesores extranjeros. Utilizando hábilmente sus “golpes de efecto”, entre los que destacan la incautación de los bienes de los banqueros Isaías; la detención de Carolina Cabrera; el cuestionamiento a las Iglesias Católica y Evangélica, que no están dispuestas a “transar con principios”; la patoja defensa de nuestra soberanía frente a la agresión Colombiana; el “cuco del retorno del anterior Congreso”; falacias con las que pretende convencernos de las bondades del SI, y para ello, con mano abierta dilapida los dineros del Estado en tumultuosas “concentraciones pagadas”, en dádivas generosas de urea y semilla certificada que ofenden a los agricultores por lo exiguas y demagógicas; en fijación de precios “convenientes “ para los productores de arroz y maíz, después de que prohibió su exportación , quebrándolos. Mientras tanto, la central hidroeléctrica “San Francisco”, agoniza prematuramente a vista y paciencia de este “Generoso”régimen. Los contratos petroleros se readjudican a dedo, la inversión extrajera se reduce a cero y los empresarios ecuatorianos también emigran en busca de seguridad jurídica y reglas claras de juego.
Así fuera la Mejor Constitución del Mundo, la más avanzada y moderna del Universo, así fuera un regalo de los Dioses, incluida la Pachamama, su origen es espúreo, porque se violaron procedimientos, se hicieron ilegales cambios de última hora , impuestos por asesores extranjeros, nació de la arbitrariedad, no del consenso y su prioridad es la concentración del Poder Absoluto en manos del Gobernante, Triste epílogo de la esperanza de un pueblo que una vez más ha sido engañado por los “redentores” de siempre. ¡Por eso voto NO ¡ ¡Ojalá pudiera hacerlo MIL VECES!
Cuando el Presidente Correa asumió el poder respaldado por una votación abrumadora, hasta los que no votamos por él nos entusiasmamos pensando que un hombre joven, inteligente, no contaminado haría algo diferente a los políticos tradicionales por un Ecuador Próspero y solidario.
El desengaño no se hizo esperar. Desde el principio puso de manifiesto su intransigencia, su inseguridad, su prepotencia, que día a día se han ido acentuando, mientras el País se polariza en bandos irreconciliables donde prevalece el odio y la rencilla propiciada por nuestro Mandatario. Aplicando a la perfección aquello de “Divide y reinarás”, ha consolidado, rápidamente , todo el poder para sí, convirtiéndose este hecho en “Razón de Estado”.
Todo lo que prometió erradicar ha tomado más fuerza: Encubrió a su gran amigo y colaborador en el “Escándalo de los Pativideos”, ninguna investigación seria, ningún detenido, simplemente echar tierra sobre los hechos, como los gatos cubren apresuradamente sus excreciones. La prensa ecuatoriana ha sido acusada de mediocre y corrupta al servicio de “Banqueros”, pretendiendo silenciarla con amenazas que van desde intimidar a los medios de comunicación hasta su soterrada incautación. Nuestros mejores comunicadores han sido tachados con los peores epítetos entre los que destacan “Gordita Horrorosa”, “Saquen a este señor de la rueda de Prensa” y “Bestias Salvajes”; Los políticos han sido su blanco favorito: “Muerte a la partidocracia”, mientras decenas de ministerios y altos puestos públicos están ocupados por esos mismos que denuesta. Intolerante en extremo con la opinión ajena que no le sea favorable: “cállate Majadera”; “por gente idiota como tu están así los emigrantes”; “indígenas, grupo folclórico y pintoresco”; “Cúpula de la Iglesia Católica al servicio de los grupos de Poder”; “Coidearios infiltrados”; “Mientras Uribe esté en el Poder, será muy difícil reestablecer relaciones con Colombia”; “Ustedes son cuatrocientos, los otros cincuenta, resuelvan el problema”.
Al más puro estilo populista y demagógico ha pretendido comprar la conciencia de los ecuatorianos pobres, con dádivas oportunistas, promesas nunca cumplidas, gastando sin control los fondos del Estado, mientras la economía se derrumba. Cientos de “primeras Piedras”, a lo largo y ancho del País, miles de proyectos maravillosos hechos simplemente de papel. Mientras tanto, los vehículos de despedazan en las carreteras intransitables, los enfermos mueren por falta de medicinas en los hospitales públicos, la delincuencia se apoderada de la ciudad y el campo y miles de ecuatorianos arriesgando su vida, emigran de este “Paraíso” buscando mejores días en otros lares.
Se siente inerme si no lo controla todo: Los Poderes del Estado, sus Instituciones, la Asamblea Constituyente, los Jueces y Magistrados, la Prensa, la Iglesia, los estudiantes y con tal propósito no importa recurrir a las “viejas prácticas”, comenzando por las atribuciones que se abrogó la Asamblea Constituyente, a la que el mandato ciudadano le impuso dos tareas solamente: hacer la nueva carta política y organizar el reordenamiento de las Instituciones Públicas. So pretexto de Poderes “Absolutos”, comenzó haciendo leyes y mandatos y terminó aprobando una Constitución entre gallos y medianoche donde se impusieron las consignas del Presidente y sus asesores extranjeros. Utilizando hábilmente sus “golpes de efecto”, entre los que destacan la incautación de los bienes de los banqueros Isaías; la detención de Carolina Cabrera; el cuestionamiento a las Iglesias Católica y Evangélica, que no están dispuestas a “transar con principios”; la patoja defensa de nuestra soberanía frente a la agresión Colombiana; el “cuco del retorno del anterior Congreso”; falacias con las que pretende convencernos de las bondades del SI, y para ello, con mano abierta dilapida los dineros del Estado en tumultuosas “concentraciones pagadas”, en dádivas generosas de urea y semilla certificada que ofenden a los agricultores por lo exiguas y demagógicas; en fijación de precios “convenientes “ para los productores de arroz y maíz, después de que prohibió su exportación , quebrándolos. Mientras tanto, la central hidroeléctrica “San Francisco”, agoniza prematuramente a vista y paciencia de este “Generoso”régimen. Los contratos petroleros se readjudican a dedo, la inversión extrajera se reduce a cero y los empresarios ecuatorianos también emigran en busca de seguridad jurídica y reglas claras de juego.
Así fuera la Mejor Constitución del Mundo, la más avanzada y moderna del Universo, así fuera un regalo de los Dioses, incluida la Pachamama, su origen es espúreo, porque se violaron procedimientos, se hicieron ilegales cambios de última hora , impuestos por asesores extranjeros, nació de la arbitrariedad, no del consenso y su prioridad es la concentración del Poder Absoluto en manos del Gobernante, Triste epílogo de la esperanza de un pueblo que una vez más ha sido engañado por los “redentores” de siempre. ¡Por eso voto NO ¡ ¡Ojalá pudiera hacerlo MIL VECES!